Aunque lo de “creadora” no lo digo en singular, porque en esta aventura siempre me acompañan mi marido Jordi… y nuestros dos perritos, Brownie y Oreo.

Tintas y Tintos nació de un momento de búsqueda. Los dos sentíamos la necesidad de crear algo juntos, aunque no teníamos muy claro el qué… hasta que, un día cualquiera, mientras yo pintaba con acuarela para desconectar, le dije a Jordi que me encantaría tener un proyecto relacionado con el arte. Él me miró y me soltó:
—¿Y si lo montamos juntos?

Así nació la idea de este espacio: un lugar donde reine la armonía, la libertad de crear, la diversión y el buen rollo.

Poco después, me di cuenta de que estaba en un trabajo que ya no me hacía feliz. No encajaba con mis compañeras, no me sentía valorada… y pensé: si no es ahora, ¿cuándo?
Porque el momento perfecto nunca llega… así que decidimos crearlo nosotros.

Y casi sin darnos cuenta, de un deseo compartido y muchas ganas, nació Tintas y Tintos: un espacio hecho con amor, donde creemos que todo mejora con una copa en la mano y un pincel en la otra.